En este 10 de mayo, mi columna está dedicada a todas las madres, abuelas, hermanas e hijas que buscan sin descanso a sus seres queridos desaparecidos en nuestro país. 

Para ellas, este día es particularmente difícil. Cada mañana, enfrentan la incertidumbre con el corazón lleno de emociones, algunas ya distantes de la esperanza, anhelando respuestas. Quieren saber qué sucedió con sus seres queridos, anhelan la certeza de poder darles un descanso digno. La búsqueda de verdad y justicia a menudo queda en segundo plano. A pesar del dolor, su fuerza es inspiradora. Hoy, y todos los días, recordemos su lucha y brindémosles nuestro apoyo y solidaridad. 

Ninguna de ellas imaginó jamás este destino, ni mucho menos lo eligió. Fueron arrojadas a una lucha que ni en sus peores pesadillas podrían haber anticipado. Sus seres queridos les fueron arrebatados, denotando una profunda falla del estado mexicano. Sin respuestas, con las puertas cerradas, con el hogar y el corazón destrozados, salen en busca del peor de los escenarios. 

En México, la cifra de personas desaparecidas y no localizadas es alarmante. Según datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO) y la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas (CNB), se registran 313,751 casos. De estos, 115,493 personas continúan sin ser encontradas. 

Los datos disponibles no reflejan la verdadera magnitud del problema. Los colectivos de búsqueda han denunciado la manipulación de información y la ineficacia en la gestión por parte del gobierno federal en el registro de personas desaparecidas. 

Además, es indignante ver el trato despectivo que el presidente, quien antes se presentaba como un luchador social cercano al pueblo, ha dado a estas madres buscadoras. Las tacha de conservadoras, les atribuye afiliaciones políticas y politiza una lucha que trasciende los límites de su mandato. Es una burla vil que prefiera reunirse con figuras del beisbol antes que escuchar las demandas legítimas de quienes buscan a sus seres queridos. 

Quiero destacar y rendir homenaje a las valientes Mujeres del Colectivo 10 de Octubre, en la zona sur de Chihuahua. Ellas representarán a 60 casos de personas desaparecidas y participarán en la marcha que se llevará a cabo en la capital del país durante el “Día de las Madres”. Su presencia en este evento es crucial para visibilizar la incansable lucha que han sostenido a lo largo de los años en la búsqueda de sus seres queridos. 

En este día, para muchas madres no hay nada que celebrar. Solo mucho por hacer. 

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