
José Alfredo Gallegos Lara, mejor conocido como el “Padre Pistolas”, es uno de los sacerdotes más polémicos de México. Su fama se debe a su carácter desafiante frente a las autoridades religiosas y su costumbre de portar armas.
Durante años, ha sido suspendido por la Arquidiócesis de Morelia debido a su lenguaje y comportamientos considerados fuera de la disciplina eclesiástica. Sin embargo, continúa oficiando misas. En septiembre de 2022, la Iglesia católica lo suspendió por “uso de lenguaje inapropiado” y “declaraciones ofensivas hacia las mujeres”.
El 2 de noviembre de 2025, durante una misa, el Padre Pistolas generó una nueva polémica al lanzar una amenaza verbal contra la gobernadora de Guanajuato, Libia Dennise García Muñoz Ledo, quien supuestamente estaría detrás de la construcción del acueducto Solís, el cual afectaría a su comunidad.
“Esa pnche gobernadora quiere matarnos de hambre. Ya dije, si insiste, nos levantamos en armas. Yo le voy a partir de su mdr*, a ella”, declaró.
Sus palabras circularon rápidamente en redes sociales y fueron condenadas por autoridades, activistas y figuras políticas. La titular de la Secretaría de las Mujeres, Citlalli Hernández, reaccionó de inmediato y aseguró que: “Ninguna mujer debe ser amenazada, ni física, ni verbalmente; como sociedad debemos condenar todo tipo de violencia.”
Por su parte, la Gobernadora de Guanajuato, Libia Dennise García le respondió: “Cuando ha habido necesidad he alzado la voz y presentado las denuncias, pero en este caso ni siquiera vale la pena hacer caso a una persona que se refiere a mí de esa manera”, aseguró.
El Partido Acción Nacional (PAN) respaldó a la mandataria y subrayó que “México necesita diálogo, no amenazas; respeto, no cobardía”.
A pesar de las controversias, Gallegos Lara sigue siendo una figura influyente en su comunidad de Chucándiro, Michoacán. Además de oficiar misas, dirige obras públicas, vende remedios caseros y promueve proyectos sociales.





