El diputado Edgar Piñón habló sobre la polémica que ha causado la distribución de los nuevos libros escolares por la Secretaría de Educación Pública, en el que se perciben deficiencias ortográficas, y eliminación de asignaturas básicas entre otros temas.
Mencionó el diputado que la educación tiene como propósito que las personas aprendan por sí mismos, y es precisamente a lo que tenemos que apostarle con los nuevos programas de educación básica.
“Nuestros niñas y niños se van a enfrentar a un mundo que no conocemos, lleno de retos y grandes desafíos, por lo que debemos brindarles las herramientas necesarias que los fortalezcan para hacer frente a ellos; situación que no contemplan los nuevos libros, los cuales presentan errores y omisiones claras”, explicó Piñón.
Lamentó que materias tan elementales como las matemáticas, sean sesgadas y reducidas en su contenido, y en opuesto, se contemplen temáticas que no se adecuan a los planes y programas vigentes, omitiendo los procedimientos legales para la elaboración de dichos libros escolares.
Destacó que incluso la Organización de las Naciones Unidas recientemente manifestó que el mundo está entrando a una era de ebullición global, y para éste gran desafío se requieren conocimientos y no sesgos ideológicos.
“De no trabajar en ello correctamente y entiempo, los más perjudicados serán las niñas y niños de México, al no poder alcanzar las habilidades o competencias deseadas desde temprana edad pues una cosa es educar para aprender y saber hacer; y, por otro lado, el de educar para adoctrinar, concluyó el legislador”.