El expresidente estadounidense Donald Trump concedió un par de entrevistas a la revista estadounidense Time, en las que revela cómo pretende que sea una eventual segunda presidencia suya, en caso de ganar las elecciones de noviembre próximo.
Uno de los elementos más polémicos de las entrevistas con Eric Cortellessa, portada de la revista bajo el título “Si gana”, fue el relacionado con el aborto, centro de debate en Estados Unidos desde el fin de la ley Roe v Wade, que permitió a los estados republicanos imponer restricciones a la interrupción del embarazo. En casos como en Florida, la restricción puede ser desde las seis semanas, lo que ha desatado polémica a nivel nacional.
En las entrevistas, Trump fue cuestionado sobre si los estados deberían “monitorear los embarazos de las mujeres para saber si han abortado”, violando las restricciones vigentes. Trump no se negó. “Creo que podrían hacerlo. De nuevo, tendrán que hablar con cada uno de los estados. Mire, el caso Roe contra Wade se trataba de devolverlo a los estados. Y esa fue una decisión legal, así como posiblemente en los corazones de algunos, en las mentes de algunos, una decisión moral. Pero fue en gran medida una decisión legal. Todos los juristas, demócratas, republicanos y otros querían que la cuestión volviera a los estados. Roe contra Wade siempre se consideró una ley muy mala. Muy mala. Fue un asunto muy malo desde el punto de vista legal. La gente se sorprendió de que durara tanto como lo hizo. Y lo que fui capaz de hacer es a través de la elección de algunas personas muy buenas que francamente fueron muy valientes, los jueces que resultó ser usted sabe, el republicano”.